Historias graciosas en ¡Atrapa un regalo!

Este post es únicamente para que todas las historias de los participantes estén juntas. Comenzamos con nuestros ejemplos y seguimos con las vuestras. Así será más visible para todos ;)

Si no sabéis de qué va esto o no sabéis cómo participar, leed el post anterior (¡Atrapa un regalo!) y sabréis cómo hacerlo ;)

Aquí van: 

CARLA

Mi historia es de hace unos años, en San Vicente de Líria, el lugar donde solíamos ir en Pascua toda la familia. Mi madre y algunos ayudantes preparaban una riquísima paella a leña y mientras, los niños y algunos acompañantes daban un paseo y jugaban a la pelota. Había un pequeño riachuelo que recorría el parque, que partía por la mitad una gran explanada donde jugábamos un improvisado partido de fútbol. En una de las jugadas, el balón salió disparado más fuerte de lo normal, cayendo en el otro lado del río, justo en el borde antes de caer al agua. Con ayuda de cañas y ramas lo intentaron coger, pero fue imposible. Para no dar toda la vuelta al parque buscando un acceso a la otra orilla, el Tete decidió que el riachuelo era lo suficientemente estrecho como para atravesarlo de un salto. Todos le dijeron que no lo hiciera, pero al ver la confianza que él tenía, lo animaron a hacerlo. Él dio unos pasos hacia detrás, cogió impulso, corrió hacia el borde del riachuelo y saltó, con tan mala suerte que sus pies llegaron únicamente hasta el borde de la otra orilla. La mala suerte no fue haber llegado, sino que el suelo de la otra orilla estaba inclinado y había gravilla, lo que hizo que sus pies se resbalasen, cayendo de espaldas al riachuelo. No era muy profundo así que la única consecuencia del hecho fue que tuvo que comer la paella mojado. Eso sí, ¡no pudimos parar de reír en todo el día! :)

ANTONIO

A mí me pareció muy divertido (sí, de verdad) que mi primera conversación seria con Pili, la abuela de Carla, fuera una charla de media hora sobre sus cacas (cómo se analizaban, cómo se guardaban en la nevera...), porque le estaban haciendo unas pruebas a la pobre. Fue guay escucharla hablar de eso mientras su hijo, Patxi, hacía una broma con cada frase que decía su madre y Carla no dejaba de reír mientras esa mujer lo contaba. Y más guay aún fue que todo ello tuviera lugar estando todos sentados en una cafetería y tomando té. Pero oye, que aguanté bien el tipo :) Me gustó mucho porque nunca me había pasado algo así con nadie, y menos la primera vez que veía al padre y a la abuela de mi novia!! :D

MARIANO

Lo que yo voy a contar está protagonizado por Sandra, Jose y yo hace bastantes años. Estábamos en mi casa de por aquel entonces y mi madre también estaba. Jose quería ver una película 'prohibida' para nosotros (por no decir otra cosa) y claro, para que mi madre no pudiera ver lo que hacíamos, pusimos el sofá delante de la puerta del comedor y, con la excusa de que Sandra le hacía un dibujo y no podía entrar, no entró. Cuando ya nos aburrimos,quitamos la película y abrimos a mi madre, Sandra corriendo le dibujó una casa con un sol y se lo dimos a Mary a lo que ella respondió que era muy bonito y lo colgó en su habitación.


ALESSANDRA


Mi historia es la siguiente!
Era un día cualquiera cuando todos estábamos en casa cenando.
Jose, Carla, el papa y yo estábamos en la mesa de la cocina y mi madre, como de costumbre, cenaba en el comedor.
No se a que se debió que mi hermana y mi madre comenzaron a discutir.
En ese momento ya era la hora del postre y nosotros teníamos por costumbre (al igual que muchos otros niños) agujerear el petit-suise con un tenedor y apretarlo para así conseguir que saliera y comérnoslo.
Ahora viene lo gracioso.
Se ve que Carla estaba tensa al discutir con mi madre y entonces al apretar el petit suise después de haberlo agujereado... no consiguio que saliera un poco si no.. QUE SE REVENTÓ POR COMPLETO!
La cara de Carla fue buenísima y la de mi madre no tanto.. más bien quería matarla! jajajajaja
Gracias a Carla conservamos por unos minutos unos magníficos grumos de petit por toda la barra y parte de la cocina :D


MARISOL


Bueno ahí va la mía: esta tiene como protagonistas a Patxi, Tete y Rafa principalmente.
Hace mucho, mucho tiempo, en una furgoneta Nissan Trade más vieja que el agua, volvía de excursión una familia feliz, cantando canciones de Marco en Valencià y todos venga a la risa, cuando el tio Rafa (Rafeta) empezó a contar que su hermana salía con un chico que vivía por la zona de Santos Justo y Pastor y les dijo a los "gamberros" de los hermanos "Sáenz Cano" que seguramente lo debían de conocer. La verdad es que no tenían ni idea de quién era pero, ya los conocéis, empezaron a tirar de la lengua al pobre Rafeta y éste, sin darse cuenta, les fue soltando datos... y de repente Patxi le dijo a su compinche Tete: ¡Nano, que me parece que ya se quién es... está hablando del POPOSACO (?????)!
Empezaron a decirle animaladas tales como:
-¡Ese tio está como una cabra!
- Se come los mocos y toreaba a los coches en la carretera.
- Estuvo en la cárcel, dile a tu hermana que tenga mucho cuidado que le dan neuras super raras... jajajaja
Y no sé cuantas cosas más, pero todo eso venga a la risa. Todos nos dimos cuenta de que estaban de coña, todos menos Rafeta que se quedó superpreocupado.
Lo mejor es que cuando llegaron a casa mi hermana le dijo: Rafa, no te lo creas que estaban de broma... ¿no ves que se estaban partiendo el culo?... no se te ocurra decirle nada a tu hermana que te mandará a paseo (como así ocurrió). 
Pero Rafa le dijo a Raquel: yo sí que me lo creo porque Patxi y Tete no se inventarian una cosa así y, además, lo conocían porque sabían muchas cosas de él... jajajaja
La verdad que a día de hoy aún me parto.
Desde aquí aprovecho para enviarle un beso a mi cuñaete Rafeta que nos ha hecho pasar tan buenos momentos con su inocencia.
¡QUE VIVA EL POPOSACO!
Besitos de granizado de limón bien fresquito.


MARY

Hola, soy Mary.
Mi historia es un reflejo de amor y cariño de toda mi familia y amigos que me quieren. Tuve un cáncer de pecho hace 7 años, lo pasé mal pero traté de sacar momentos buenos. A mí me gusta en verano ir a la piscina, me quedé calva de la quimio y entonces con mi hijo y mis sobrinos me iba a nadar. Para que no me vieran mi cabeza calva me puse un gorro de goma, parecía una nadadora profesional y lo más gracioso es que nado como un perrito en el agua.
Entonces me tiraba a la piscina y todos los niños venían a nadar a mi lado.
Ese año dentro del mar lo pasé bien con las risas y alegrías, junto con mi gorro de goma y mi familia.
Dentro del mal siempre ay que buscar cosas buenas. Hay que vivir el momento y ser felices.
Besitos.

¡Besitos de yogur con cereales! ^^

Carla y Tiantian :)